Más del 50%, de los profesionales afirman que se guían más para elegir o contratar un prospecto, teniendo dos perfiles similares, en la imagen personal.Esta juega un papel decisivo, en la decisión a tomar. Esto dice, Irene Jordan, asesora de imagen.
Las joyas llamativas son un error, porque distraen al entrevistador. Se debe evitar usar pulseras que suenen o collares demasiado llamativos; los accesorios no tienen que ser necesariamente finos, pero sí, que aparenten serlo y entre más delicados mejor.
Vestirse informal, no es recomendable, porque la primera impresión externa, es el 50%, mas importante, o sea que cómo se vista y maquille, es importante; no importa al tipo de industria para la que esté aplicando, se recomienda vestirse un grado más formal de lo que harías, en el día a día, en este trabajo. Los tenis y los jeans deben evitarse.
El mejor color para una entrevista de trabajo es el azul; proyecta seriedad, profesionalismo y credibilidad; no se recomienda el naranja ya que es un color social y se puede asociar con falta de compromiso.
Evite usar prendas sensuales, porque todo lo que se relacione con la sensualidad de una mujer, resta credibilidad en un ámbito de trabajo o negocios. No se debe usar faldas cortas, escotes pronunciados, encajes transparentes.
Se ha demostrado que en el ámbito de negocios los hombres perciben, que las mujeres que usan un maquillaje natural son más inteligentes y tienen mayor credibilidad que las que llevan un exceso de maquillaje o la cara lavada.
El bolso y los zapatos, son el símbolo de estatus de una mujer, es recomendable invertir un poco más de dinero, en éstas prendas para tener un buen look y a la vez generar una presencia profesional e impecable.
Estamos tan acostumbrados al olor del perfume, que se tiende a aplicar demasiado; por lo tanto es recomendable aplicarse muy poco, ya que el exceso de este puede causar molestia como, malestar y mareo al entrevistador y esto perjudicaría el desempeño en la entrevista.
No se debe llegar a una entrevista de trabajo con el pelo sucio, las manos mal arregladas, la ropa arrugada, esto resta credibilidad y da la impresión de una falta de compromiso e interés por el trabajo.
Tener un lenguaje corporal negativo o débil como no mirar a los ojos, encoger los hombros o reducir el espacio corporal cruzando los brazos, es falta de seguridad en usted. La gesticulación es sumamente importante para mantener la atención del entrevistador.
El comportamiento es un 38% que dentro de la primera impresión, es muy importante. Pautas básicas de protocolo, como el saludo, cuándo sentarse, cómo presentarse y formas de agradecimiento pueden hacer la diferencia entre un candidato y otro.
Cada uno de nosotros es una marca personal y toda marca necesita diferenciarse y generar recordación. Piensa qué te hace única y cómo lo puedes comunicar a través de tu imagen o en el momento de responder.
Fuente: Irene Jordan Imagen: Pixabay_1899441
