El síndrome del Superviviente se le denomina al sentimiento de culpa que aparece en los supervivientes de diversas situaciones y lo genera el Trastorno por Estrés Postraumático.
Este síndrome en principio se detectó en los supervivientes de los campos de concentración, las bombas de Hiroshima y Nagasaki y la Guerra de Vietnam. Se podía observar en quienes supervivieron signos característicos como: problemas de sueño, depresión, pesadillas recurrentes, aislamiento social, entre otros.
También se ha detectado que se presenta después de sufrir catástrofes, accidentes y hasta despidos masivos en las empresas.
Se manifiesta inicialmente con el sentimiento de culpa que siente el superviviente. Esta es la forma como lo narra Edith: “La memoria es un terreno sagrado. Pero también embrujado. Es el lugar en el que mi rabia, mi culpa y mi pena dan vueltas como pájaros hambrientos en busca de los mismos huesos viejos. Es el lugar al que acudo en busca de la respuesta a la pregunta que no puede contestarse. ¿Por qué sobreviví?”
Se puede presentar exceso o pérdida de apetito.
En los sueños el evento aparece frecuentemente.
Se producen reviviscencias del hecho o ‘flashbacks‘ traídos inconscientemente a la memoria por olores, sonidos, palabras, etc.
Si no se trata adecuadamente produce dificultades para continuar con una vida normal y en casos más graves se puede llegar al suicidio.
Si como en el caso de Edith se pierden seres queridos es aún más traumático, pues siempre se tiene el sentimiento de culpa de por qué se hizo esto y no aquello. Edith se culpaba porque le dijo a Mengele (oficial y médico perteneciente a la SS en la Segunda Guerra Mundial, seleccionaba víctimas para las cámaras de gas).que quien estaba al lado de ella era su mamá, según ella si hubiera dicho que era su hermana la hubiera salvado de morir en la cámara de gas.
Síndrome del superviviente en el trabajo
En este caso el síndrome del superviviente se manifiesta con la culpa de no haber sido despedido. Esto genera estrés y quizá el dolor de que alguien que haya sido amigo sufrió esa pérdida.
Adicional es probable que al generarse un despido masivo quienes quedan tengan que asumir las funciones de quienes se fueron y eso genera inconformismo, ira y desconfianza.
El ambiente laboral se torna tenso y quien se queda siempre estará pensando si será el próximo en ser despedido.
Cómo se logra superar este síndrome
Es normal que al pasar por momentos difíciles que marcan la vida de las personas se tenga una reacción como la culpa, la ira, las pesadillas, pero si esto genera problemas de socialización e incapacidad de seguir con una vida normal, hay que acudir sin duda alguna con un especialista.
Edith cuenta que a ella le tomó muchos años el reconocer que necesitaba ayuda, es decir tarde que temprano si no se hace algo por confrontar lo que se siente explotará y habrá que solucionarlo. Al respecto ella dice: “Únicamente después de muchos años llegué a entender que huir no cura el dolor. Lo empeora”.
Las palabras que alguna vez le dijo su madre la ayudaron a mantenerse con vida durante el Holocausto y luego a supervivir, estas fueron: “No sabemos adónde vamos, no sabemos qué va a pasar, pero nadie puede quitarte lo que pones en tu mente”. Es decir que con ayuda y enfrentando lo que te sucede, tu mente te ayudará finalmente a sanar.
Y entonces Edith concluye: “Me llevó tres décadas descubrir que podía encarar mi vida con una pregunta diferente. No ¿por qué vivo?, sino ¿qué puedo hacer con la vida que he recibido?”
“No podemos decidir tener una vida sin dolor. Pero podemos decidir ser libres, escapar del pasado, nos suceda lo que nos suceda, y adaptarnos a lo posible. Te invito a que decidas ser libre.” Edith Eger
Autor: Vilma Guzmán
Fuentes: en.wikipedia.org, planetadelibros.com, planetadelibros.com, portal.ugt.org, psiquiatria.com, mscbs.gob.es, es.wikipedia.org
Imagenes: Diseño en Canva por Vilma Guzmán
Videos: Youtube - Goalcast Español
