De toda época ha surgido, y toda región ha soñado en descubrir la máxima expresión de un hombre. Un iluminado que, despierte antes que el resto de los humanos. Un ser que se atreva a experimentar su grandeza no importándole lo que digan los demás.
Ese ser tan simple en apariencia, como cualquiera. Súbitamente, despierta su ser interior y se atreve a ser diferente a sus coterráneos: las críticas no le afectan, los insultos no le ofenden, porque él, bien sabe que, está en la verdad.
Para algunos es un santo, para otros un orate, para pocos un soñador. No sabiendo qué es el único despierto en la inmensa realidad. Unas culturas le llamarían: Buda, otras el Cristo, o sencillamente el Iluminado ¡es consciente de sí mismo, sabe de donde viene, quien es realmente y a dónde se dirige y porque está en esta realidad!
Rosur.