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Madre, la más tierna de las Madres. Maestra la más abnegada que nos enseña ¿Cómo te retribuiremos todo el tiempo que nos has dedicado, tejiendo para nosotros aquellos lazos de amor, entre aquellos, nuestros hermanos mayores y nosotros?
En tus labios refulge la gracia prístina, cada vez que nos enseñas el camino correcto de la Conciencia Divina.
Comprensión que nos despiertas y nos lleva a alcanzar el manejo de nuestras energías, para un día llegar a la Divinidad.
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— Rosur.
