La influencia de nuestros estados de ánimo y nuestra percepción ante la vida son los que generan con el tiempo las enfermedades. No se quiere decir con esto que debamos estar alegres todo el tiempo y hacer de cuenta que no pasa nada a nuestro alrededor. Pero la actitud que tengamos frente a los aconteceres de la vida es la que puede mantener sano nuestro cuerpo y mente.
El Dr. Mario Alonso Puig quien es médico especialista en cirugía general y del aparato digestivo además de ser miembro de la Harvard University Medical School, da un ejemplo en una entrevista con respecto al manejo de las emociones.
El Dr. Puig dice que llegó a su consultorio una paciente que padecía de dolores de estómago desde hacía 3 años, él revisó atentamente los exámenes que ella le llevó y todo estaba normal. Entonces le preguntó que si había algo que le generara mucha tensión, se calló y luego le dijo que era el jefe. Él le recomendó que cada vez que viera a su jefe le sonriera, a lo que ella le respondió que su jefe no se lo merecía. Sin embargo le dijo que probara hacerlo por su salud y que fingiera la sonrisa.
La paciente puso en práctica la recomendación del Dr. Puig y luego de dos semanas regresó a consulta con el resultado, le sucedieron tres cosas: primero su jefe empezó a cambiar, segundo se le quitó el dolor de estómago y tercero dejó de tomar un medicamento adicional para dicho dolor.
Dice el Dr. Puig que en este ejemplo la sonrisa tiene la capacidad de activar el circuito de la angustia porque se le manda un mensaje al cerebro de que todo está bien, si se aguanta la sonrisa, el cerebro necesariamente tiene que hacer algo para adaptarse a ese mensaje. Ese mismo efecto lo producen las palabras positivas.
¿Pero cómo funciona esta acción en nuestro cerebro? El Dr. Puig dice al respecto que el cerebro se conecta al tubo digestivo por medio de la ínsula de Reil y por allí se genera tanto la enfermedad como la curación.
Aunque él dice que tenemos al menos tres cerebros: el intracraneal, el del corazón y el del tubo digestivo. Se debe entender que al decir esto se refiere a toda estructura que tiene redes neuronales y que son capaces de llevar procesos de coordinación en el organismo. Dice que el corazón tiene alrededor de 40.000 neuronas y el tubo digestivo cerca de 500 millones que controla procesos cerebrales, se relaciona con enfermedades cerebrales de corte neurológico y se daña terriblemente por situaciones de estrés emocional. Estos tres sistemas están enormemente coordinados.
El Dr. Puig recomienda que cuando se está muy enojado, se debe caminar de forma rápida, acelerando el paso, no correr, por lo menos durante 20 minutos, esta acción hace que las hormonas oxitocina y betandorfina se activen y sean capaces de desconectar un núcleo cerebral que se llama la amígdala. La amígdala y el hipotálamo son las bases de las reacciones de ira.
Para mantenernos con buena salud debemos tener un sano cuidado de nosotros mismos aprendiendo a manejar nuestras emociones.
Autor: Vilma Guzmán
Fuente: marioalonsopuig, mheducation.es, imbanaco.com, psicologiacientifica.com, fundacionclinicadelafamilia.org, shaio.org, elcomercio.es, topdoctors.es, regenerahealth.com, mejorconsalud.as.com, lasexta.com.
Video: Youtube - FisioOnline, Youtube - TEDx Talks, Youtube - Newman Institute.
Imagenes: Vilma Guzmán (Canva)