✨ Hoy celebramos el cumpleaños de una mujer que tocó muchas vidas: la maestra Olsegua, una guía, una amiga, un alma generosa que supo sembrar amor en cada paso.
Aunque ya no está físicamente con nosotros, su legado sigue más vivo que nunca. Quienes la conocieron saben de su ternura, su alegría contagiosa, su fuerza creativa y su fe inquebrantable en el poder del amor. Fue una mujer dinámica, carismática, optimista, siempre dispuesta a ayudar, a enseñar, a escuchar. Una verdadera maestra del alma.
Este video —donde la vemos celebrando su vida con esa luz tan suya— es un pequeño homenaje para recordar lo que realmente permanece: el amor que damos, la energía que dejamos en otros, y la manera en que inspiramos con nuestro ejemplo.
Hoy los invito a mirar a su alrededor, a valorar a esas personas que con su presencia nos hacen mejores. A honrar a quienes nos han guiado y a seguir transmitiendo su luz con nuestras acciones.
